Publicado en La Opinión el 17/09/2007.
El premio Thyssen Krupp de 2007, al que concurren proyectos de España, Portugal y Oriente Próximo, pretende dar solución a la llegada del AVE a la ciudad. El fallo no es vinculante.
Una veintena de arquitectos de Oriente Próximo, España y Portugal participan en un concurso para construir la nueva estación de Renfe y dar una solución urbanística a su entorno.
Granada es conocida por albergar el monumento de arquitectura nazarí más importante del sur de Europa, la Alhambra, y siete siglos después de su finalización, la ciudad apuesta por incorporar a su entramado urbano edificios de arquitectura singular, que se precien de ser visitados y admirados.
La estación ferroviaria de Andaluces, que sufrirá una remodelación con motivo de la llegada del AVE, y su entorno pueden convertirse en un motivo más para la contemplación urbana. El espacio que comprende desde la circunvalación hasta la estación, pasando por el barrio de Los Pajaritos, será objeto de una transformación profunda en la que ya están pensando arquitectos de toda España, Portugal y Oriente Próximo que participan en la décima convocatoria del Premio Thyssen Krupp 2007.
El día 27 de este mes el jurado del certamen dará a conocer los trabajos ganadores de entre una veintena de presentados, aseguraron fuentes de la organización. La iniciativa, que es de carácter privado y no es vinculante, ofrecerá a las administraciones implicadas en la remodelación de la infraestructura y del espacio público que la rodea, un buen número de ideas que pueden arrojar luz sobre la nueva ordenación.
Al premio han sido invitados profesionales de la península ibérica, Arabia Saudí, Argelia, Bahrein, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Irak, Jordania, Kuwait, Líbano, Libia, Marruecos, Omán, Palestina, Qatar, Siria, Túnez y Yemen, aunque la mayoría de los proyectos recibidos son españoles.
La elección de Granada responde al interés de los organizadores por ligar su imagen corporativa a una ciudad con una historia forjada por “diferentes culturas”. Los promotores detallan que los trabajos deben reflejar una reordenación de los espacios desde la periferia hasta el corazón urbano, en donde los espacios abiertos que inviten a pasear toman una especial relevancia. Además de dar una solución atractiva y funcional a la integración de los tramos de vía en el tejido urbanístico y en consonancia con el Plan General de Ordenación Urbana de 2001, los proyectos deben compatibilizar el uso público de la infraestructura para el transporte de personas y la facilidad de acceso a una zona de la ciudad que soporta un gran volumen de tráfico.
Los proyectos tienen que acompasar la creación de las nuevas piezas con operaciones de reestructuración de la trama urbana existente. Se plantea la creación de las nuevas vías de entrada a la ciudad “privilegiadas por la calidad ambiental y paisajística”. En este punto destaca la intención de construir un mirador sobre las vías y su cruce con Camino de Ronda, y la construcción de un paseo que conecte el barrio de Los Pajaritos con Renfe.
Del diseño de Fomento, la Junta y el Ayuntamiento para la transformación de la terminal de transporte público se conoce la propuesta del PGOU de hace seis años, que no aclara si la estación quedará como un edificio de arquitectura innovadora que impacte en el recién llegado. Sin embargo, existen otros edificios granadinos que ya destacan por su diseño rompedor. Es el caso de la sede de CajaGranada, del arquitecto Alberto Campo Baeza. Ganador del concurso público convocado en 1992 y terminado en el 2001, sobresale de entre los edificios cercanos por sus líneas puras y al que se le sumará el Centro Cultural, ahora en construcción.
Símbolo de riqueza. Otras entidades se suman a la tendencia de hacer de sus sedes sociales edificios significativos de su bonanza económica, como el que acogerá la nueva sede de Emasagra. La empresa que gestiona el ciclo integral del agua en la capital y algunos municipios del área metropolitana está pensando en su traslado a una zona de expansión de la ciudad en donde levantar un inmueble que se convierta en su nueva seña de identidad. Con esta intención ya ha solicitado el cambio de uso de su sede actual, en la calle Molinos, y busca terrenos municipales próximos a su nueva área de influencia en el cinturón que solventen los problemas de accesibilidad que presenta su actual edificio.
El centro de ocio y de negocios del Serrallo que acogerá una torre de 18 plantas fue calificado por la Gerencia de Urbanismo como “arquitectura de vanguardia”. En la zona norte también se ha proyectado una ordenación urbanística que, como poco, llamará la atención de granadinos y visitantes. Se ha propuesto levantar dos edificios que, con sus más de veinte plantas, tendrán la mayor altura de la capital y un tercer edificio que también será único por sus extraordinarias dimensiones y en especial por sus cien metros de fachada lineal.
Las administraciones públicas también apuestan por este tipo de construcciones: En unas semanas se hará público el pliego de condiciones del concurso para construir el gran espacio escénico; y el Centro Lorca, en la plaza de la Romanilla, también fue resultado de un concurso del que resultó vencedor ´Escenarios Urbanos´, un proyecto rompedor de los arquitectos Mara Gabriela Partida y Héctor Mendoza, así como la nueva sede de Diputación y la de la Junta, todavía en construcción. El resultado del concurso de Thyssen Krupp se conocerá la próxima semana, aunque la verdadera solución a la entrada de la alta velocidad, el soterramiento de una parte de las vías y la construcción de una nueva estación ferroviaria se adivina lejano en el tiempo.