Publicado en Granada Hoy el 12/01/2010.
Renuncia ante la falta de respaldo de quienes le nombraron y confiesa que se ha sentido “muy solo” y sin saber muy bien cuál era su función · “Hace falta alguien con un perfil más político”, dice David Aguilar renunció ayer a la presidencia del consorcio para la conmemoración del Milenio del Reino de Granada, un cargo que ostentaba de manera oficial desde noviembre de 2009, si bien llevaba ejerciendo esa actividad desde un año antes.En un comunicado enviado a primeras horas de la mañana, Aguilar justificaba su renuncia en “estrictos motivos personales”, ya que no podía compatibilizar ese cargo con sus “nuevas labores académicas”. Así se lo comunicó, en primer lugar, al consejero de la Presidencia de la Junta de Andalucía, Antonio Ávila. Era, dijo después, “la primera persona que debía enterarse, por ser la que me nombró”.
Sin embargo, no es difícil adivinar que hay más motivos, y el propio Aguilar, poco después, dio algunos de ellos. Entre otros, que no se sintió “totalmente respaldado” por las instituciones integradas en el consorcio, que, durante los catorce meses que ha desempeñado esa función se sintió más de una vez “en una soledad profunda” y que padeció demasiado a menudo el bloqueo burocrático tan propio de la política, especialmente acusado en todo lo que rodea al Milenio. “A veces he tenido la sensación de que éste era el Milenio de David Aguilar, cuando en absoluto debería ser así”, se lamentó, en lo que fácilmente se puede interpretar como otra crítica al poco respaldo que ha recibido de parte de quienes supuestamente confiaron en él.
“Sigo creyendo en el proyecto del Milenio, porque creo que puede servir para promocionar a Granada. Realmente me ilusioné con esto y pensé que podría sacarlo adelante, pero he terminado por ver que al frente del consorcio debe estar una persona con otro perfil diferente al mío. Yo, al fin y al cabo, he sido alguien vinculado al ámbito de la docencia, y aquí hace falta alguien con más presencia institucional, del máximo nivel posible, que lo sepa impulsar, algo que al parecer yo no he sabido hacer”, dijo, en un tono autocrítico, posiblemente demasiado.
Admitió que en todo este tiempo ha notado la indefinición que rodeaba a su cargo. “Me sentí en tierra de nadie, porque no tenía la posición institucional relevante que se necesita para liderar esto”, dijo, y añadió que conforme avanzó el proyecto, su situación fue complicándose aún más. “Cambiaron las personas y las estrategias y el Milenio se hizo muy complejo, sobre todo al englobar a tantas instituciones distintas, al entrar las diputaciones de otras provincias, varios ayuntamientos… Es una configuración difícil para conseguir unanimidad y entusiasmo en torno a proyectos en concreto”, aseguró.
No se fue antes porque, explicó, quiso darse “margen para tratar de arrancar”, pero al ver que eso no sucedía, se hizo la “reflexión” que ha desembocado en su retirada.
Estaba, vino a decir, en una encrucijada. Si continuaba en el cargo debía hacerlo para los próximos cuatro años, sin bajarse ya del tren bajo ningún concepto. Pero seguiría teniendo como hándicap esa escasa presencia institucional de la que habla y tendría que haber renunciado a la actividad académica. El Milenio le habría ocupado todo el tiempo. Y ahora que tiene presupuesto y la maquinaria, por así decirlo, se ha puesto en marcha, ha decidido que era el momento ideal para ceder el paso a esa otra persona “de perfil más político e institucional”.
Eso sí, se pone a disposición del equipo que le sustituya, al que trasladará el esbozo de la programación cultural que estaba ultimando, que quería hacer pública en el primer trimestre de este año -primero dijo que era fundamental presentarla a lo largo de 2009, pero no pudo ser porque, entre otras cosas, el consorcio ni siquiera fue formalmente constituido hasta noviembre de ese año- y que ahora no está muy claro cuándo verá la luz.
El PSOE garantiza que la renuncia de Aguilar no afectará al desarrollo del Milenio, que provisionalmente queda en manos del delegado de la Junta en Granada, Jesús Huertas, hasta que se encuentre un sustituto.
Según manifestaron ayer el propio Huertas y el secretario general del PSOE granadino, Francisco Álvarez de la Chica, ese nombre será fruto del consenso entre todas las instituciones integradas en el consorcio. Sin embargo, está claro que es una carrera que tiene favoritos.
La que más, probablemente, Teresa Jiménez. La anterior delegada de la Junta acreditó en ese cargo su capacidad de gestión, tiene el perfil político del que habla David Aguilar y el PSOE le busca un puesto institucional desde que fue relevada como consejera de Educación. Un segundo candidato podría ser el diputado Manuel Pezzi, que se ha vinculado especialmente a proyectos del Milenio como el del Parque de la Vega.