La segunda ciudad de la provincia defiende su vinculación con la conmemoración del Reino de Granada y quiere conseguir así un gran auditorio y la rehabilitación de la Fábrica del Pilar.
Publicado en Ideal el 18/10/2009.
Aunque todavía es el gran desconocido, el acontecimiento del que poco se sabe, Motril espera con mucha ilusión la llegada del Milenio. La segunda ciudad de la provincia sueña y desea que la conmemoración de la fundación del Reino de Granada le ayude a pegar el estirón, en el sentido cultural, para reafirmarse como capital de la Costa, para acoger grandes espectáculos y contar con un museo único en Europa. Las expectativas de los motrileños comenzaron a crecer cuando se planteó el Milenio como un vía para eliminar los déficits de infraestructuras culturales en la provincia. Así, desde el Ayuntamiento consideraron que sería una buena oportunidad para satisfacer dos grandes deseos para los que el dinero municipal no llega: un gran auditorio y la rehabilitación de la Fábrica del Pilar. La ciudad tiene fuertes argumentos para justificar sus peticiones. «La Costa no cuenta con un espacio escénico de más de 350 localidades. Cuando Manuel Chaves vino a Motril se extrañó de que no existiera una infraestructura así. Tenemos que conseguirla», explica Nicolás Navarro, concejal de Cultura.
El auditorio tendría un diseño impactante, mil localidades y estaría situado detrás del nuevo edificio de Hacienda, en 8.000 metros cuadrados municipales que ya han sido puestos a disposición de la Junta de Andalucía.
Un poco de historia
Para lograr la rehabilitación de la Fábrica del Pilar aportan una explicación más contundente aún: la potenciación y preservación del patrimonio industrial azucarero de Motril «íntimamente relacionado con los motivos de la celebración». Navarro expone que el Reino de Granada tiene relación con la introducción del azúcar. Las primeras noticias sobre la presencia en Al-Andalus de la caña, de origen oriental, se remontan al Siglo X, en la Costa granadina, según apunta el concejal.
Por eso, con esta buena ‘excusa’ Motril espera conseguir el ambicioso proyecto de transformación de la Fábrica del Pilar, para el que, después de una primera fase de rehabilitación, se necesitarían unos seis millones de euros más.
Desde el Ayuntamiento quieren que las administraciones entiendan que la potenciación de este conjunto industrial azucarero, no es un proyecto local sino provincial. «Será un espacio único en Europa, con maquinaria que data de 1880. Ofrecerá una oferta cultural y de ocio relacionada con la caña y tendrá hasta un espacio dedicado a la hostelería», explica Nicolás Navarro.
Pero, claro, lo que quieren desde el Ayuntamiento es una gran inyección económica para no tener que estar mendigando euro a euro y para que el proyecto no se alargue y tarde muchos años en ser una realidad.
«Queremos que uno de los proyectos estrella del Milenio sea la Fábrica del Pilar, para una inversión tan grande como se prevé, será casi insignificante», explicó el concejal de Cultura. Insignificante para el gran presupuesto que tendrá este acontecimiento y un mundo para Motril, que ahora llama a las puertas de las administraciones para lograr dinero para la segunda fase.
«La obra habrá que seguir haciéndola por fases, pero lo ideal sería contar con una partida plurianual asegurada», aclara el edil. Por ahora, el Ayuntamiento de Motril espera alguna respuesta por parte de los organizadores del Milenio. El pleno municipal ya ha solicitado formar parte del consorcio que se hará cargo de la conmemoración de la marca Reino de Granada. También han pedido formalmente que se tome en cuenta la necesidad de un auditorio y la magia y la singularidad de recuperar y dar vida a uno de los ingenios de la ciudad.
«Por ahora no se han pronunciado. Sabemos que han recibido un bombardeo de propuestas por parte de varios municipios. Motril ha querido estar ahí formalmente antes de que se tomen decisiones», subraya el concejal de Cultura. Motril no se viene abajo. «Hemos pedido varias veces una reunión con la consejera de Cultura de la Junta. Todavía no nos la han concedido. Tenemos que transmitirle la importancia de nuestros proyectos. Estamos ante una oportunidad histórica», señala Navarro que no pierde los ánimos ni las esperanzas.