El PSOE no puede fijar una fecha para la finalización de la carretera y, pese a que ve “factible” abrirla en julio, admite que entonces puede haber tramos sin acabar.
Publicado en Granada Hoy el 20/06/2008.
“Estará a principios de verano”, dijeron una y otra vez los candidatos y cargos socialistas cuando se referían a la A-44. Todavía no se habían celebrado las elecciones generales y autonómicas del 9 de marzo y por lo tanto quedaban aún varios meses para que llegara el calor, pero quienes creyeron el mensaje empezaron a pensar que se enfrentaban, por fin, a un verano sin conos y sin retenciones.“Lo que dice nuestro programa electoral, nuestro auténtico compromiso, es que la A-44 estará en este verano”, puntualizó ayer el diputado socialista Manuel Pezzi, uno de los que en la campaña, y después de ella, pronunció las palabras mágicas: “A principios de verano”. El parlamentario reconoció ayer que se le fue un poco la mano. “A lo mejor algunos fuimos más precisos de la cuenta. No debimos decir eso”, subrayó.
El caso es que el verano empieza oficialmente mañana y no hay un plazo exacto de finalización. Acciona, la empresa que ejecuta las obras en los tres tramos pendientes, no ha especificado cuándo acabará y se limita a decir que la autovía está “casi terminada”. Ni había fecha entonces, ni la hay ahora. Así lo admiten los socialistas, quienes, resumiéndolo mucho, manejan dos discursos.
El más optimista es que es “factible” que la autovía esté “prácticamente finalizada a lo largo del mes de julio”. Y ese “prácticamente” significa que es probable que en algún tramo de los 18 kilómetros aún por abrir no se disponga para entonces de dos carriles para cada sentido. “Pero serían unos cientos de metros”, puntualiza el diputado, quitando hierro al asunto.
De lo contrario, hay un Plan B, como se dice ahora: el programa electoral del PSOE -en concreto la medida número 78- dice textualmente que la autovía se finalizará este verano, con lo que el plazo se extendería hasta el 21 de septiembre. Aunque Pezzi trata de evitar a toda costa ponerse en ese escenario, una frase suya deja abierta la posibilidad: “Lo que pone en el programa, que es nuestro compromiso por escrito con los ciudadanos, es que estará en ve rano, y eso lo cumpliremos”. A renglón seguido, y advirtiendo que no son “excusas”, aunque lo parezcan, el parlamentario y componente de la comisión de Infraestructuras del Congreso enumera algunos inconvenientes con los que ha topado la obra. Entre otros, menciona la huelga del metal, la de los transportistas y circunstancias más previsibles, como que se están soldando piezas de hierro de más de una tonelada a cien metros de altura. Declara que hay puntos “muy difíciles”, como el del viaducto sobre la presa de Rules. Y no olvida comentar que no sólo se van a abrir los tramos pendientes, sino que se va a adelantar en varios meses la puesta en servicio del Guadalfeo-La Gorgoracha, que en realidad corresponde a la A-7 y que es “de gran importancia” porque es el nudo de acceso a la costa.