Publicado en Granada Hoy el 07/06/2007.
El alcalde de Granada, José Torres Hurtado, se mostró ayer sorprendido por que el presidente andaluz, Manuel Chaves, esté dispuesto a licitar los tramos del Metro que discurren por la capital “sin sentarse a negociar antes con el Ayuntamiento” sobre asuntos respecto a los que aún no hay acuerdo. Según informó Efe, Torres Hurtado se refirió así a la licitación en julio de los tramos entre Maracena y Villarejo y Camino de Ronda-Campus de la Salud, anunciada el martes por Chaves. El alcalde consideró “un poco fuerte que el presidente de la Junta no se haya enterado de que hay un alcalde y un ayuntamiento que debe decir algo en la licitación de esas obras”.
En este sentido, explicó que “aún no está totalmente cerrado cómo y de qué manera va a ser el trazado exacto por la capital, si va a ir partiendo las rotondas, como en un principio planteaban, si va a ir por los laterales o si se va a hacer una estación intermodal”.
“Yo cada día entiendo menos al PSOE de Andalucía, porque se creen que Andalucía es su cortijo y desprecian olímpicamente al Ayuntamiento sin haber cerrado todo ese acuerdo”, se lamentó el alcalde.
Torres Hurtado se mostró dispuesto a “sentarse” a cerrar estos asuntos que suponen “temas muy importantes para Granada”, como que la estación del futuro AVE cuente con una conexión intermodal con el metro, o que no atraviese rotondas y bulevares de la ciudad como planteaba el proyecto inicial.
“Creo que (Manuel) Chaves ayer estuvo un poco ligero de palabras y corto de relaciones institucionales”, dijo el alcalde, quien atribuyó el anuncio del presidente andaluz de licitar las obras del metro a su paso por la capital granadina en julio a que “no estaría informado de a qué nivel están esas negociaciones”.
Según Torres Hurtado, “lo que hace falta es sentarse a negociar y a terminar los acuerdos, yo estoy de acuerdo en casi todo, pero en lo que no puedo estar de acuerdo es en que me hagan un metro destrozándome la ciudad, de la que por ahora soy responsable, y me parece que los ciudadanos han dicho que lo siga siendo, qué menos que se siente a hablar con el alcalde”.
El alcalde acusó a la Junta de querer imponer su modelo de Metro “como un rodillo, esto es mío y como es una obra mía, no tengo que pedirle permiso a nadie; ésas no son las formas y los granadinos se lo han dicho, pero parece que hay a quien le cuesta aprender la lección”, sentenció
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