¿Una idea brillante?

Publicado en La Opinión el 21/10/2008.

Juan Manuel Segura.

Con este y otros adjetivos calificaba el secretario del PP, Sr. Ayllón, el apoyo rotundo y unánime de su partido a nuestro alcalde Sr. Torres Hurtado para que se permute la casa de Agreda por el edificio del banco de España.

¡Cómo me apena no ser político! Ser político en este tiempo es algo así como obtener todas las licenciaturas en cinco días, y así, convertidos en expertos en todas las materias, no necesitan para nada de consultas ni asesores. Además, cuentan con la preciada difusión de los medios de comunicación que cada día les publican cuanto disparate engendran tratando de confundir a los ciudadanos que con marcada intención de crítica social ejercemos la sana costumbre de pensar y razonar.

Considero obligado en primer lugar rastrear y hacer un breve recorrido sobre el estado de la cuestión: Es cierto que el Sr. Moratalla, alcalde de Granada por el partido socialista, pidió el banco de España para museo de la ciudad en un momento en que la mayoría de los granadinos desconocía que el palacio de Agreda era propiedad municipal y cabía la posibilidad de desocuparlo de los inquilinos que tenía desde 1940. A pesar de esto, aquel día desapacible de abril de 2007, un grupo de ciudadanos conscientes nos manifestamos en la puerta del banco a la llegada de la consejera de Justicia Dª Mª José López, junto al fiscal general del Estado D. Cándido Conde-Pompido, indignados porque de nuevo a los granadinos nos tomaban el pelo. Por cierto, que entre los manifestantes no contamos con ninguno de los políticos que ahora proclaman su interés en el cambalache.

El rechazo municipal a la instalación del museo de la ciudad en la casa de Agreda, bajo el falso pretexto de que Agreda no reúne las condiciones, se cae por su propio peso. Ni falta una caja fuerte, ni tiene problemas de acceso, ni el acondicionamiento es más costoso. No es cierto.

Camiones pequeños, desde luego no trailer, llegan hasta la puerta de Agreda entrando por Plaza Nueva. El estrechamiento de San Juan de los Reyes no forma parte de la ruta necesaria. Por suerte, estamos construyendo una ciudad peatonal, que nos conduce al museo por una de las más hermosas zonas de la ciudad histórica.

Como suponemos que nuestras autoridades no ignoran, muchos museos del mundo están ubicados en los cascos antiguos de las ciudades, donde la mayoría de las calles son estrechas y peatonales (no piensen sólo como ejemplo en el museo del Prado). Madrid es una ciudad trazada en la época de Carlos III y la mayoría de los edificios nobles están ubicados en grandes avenidas. Pero aún así en la zona antigua están el museo Romántico, el museo Cerralbo, las Descalzas Reales y el Monasterio de la Encarnación. Y si hacemos un recorrido por España, el museo Picasso en Barcelona, a pesar del su estilo de pintura, está ubicado en cinco palacios de los siglos XIII y XIV de la calle Moncada, en el barrio gótico. En Toledo, el museo del Greco está en plena Judería en un palacio renacentista del XVI. En Cáceres, en dos edificios históricos del casco antiguo de la ciudad, declarado Patrimonio de la Humanidad, uno de ellos ‘La casa de las Veletas’, también conocido como casa del Aljibe porque en sus estancias se conserva un aljibe Almohade del antiguo Alcázar del siglo XI. Si hablamos de Andalucía, el museo de Sevilla está en el Convento de la Merced del siglo XVII. En Córdoba, compartiendo espacio con el museo Julio Romero de Torres, en la Plaza del Potro, en el que fuera Hospital de la Caridad, edificio del siglo XV aunque la arquitectura más notable como la escalera, el patio y la capilla son del XVI. En Málaga, el Palacio de Buenavista del siglo XVI, antiguo museo de Bellas Artes, fue exigido por los herederos de Picasso para su museo, rechazando cualquier otra alternativa. Por otra parte, la casa de Agreda, sigue siendo la misma y con la misma ubicación que en febrero del 2006 cuando el Partido Popular, con su anterior anterior equipo, tramitó documentación en la Subdelegación de Gobierno para recibir fondos de la Comunidad Europea y restaurar Agreda como museo de la ciudad.

No se puede imaginar edificio más idóneo. El palacio de Agreda tiene todas las posibilidades, cubre todas las necesidades y está situado en una zona riquísima en patrimonio, que vendría a completar un eje museístico de calidad insuperable. Incluso tiene la posibilidad de ampliación, complementándolo con el edificio contiguo, también del siglo XVI, el convento de Santa Inés, posiblemente comunicado por la capilla dotada por D. Diego de Agreda para su enterramiento. Agreda es un remanso de paz con vistas maravillosas a la Alhambra, ubicado en un barrio declarado Patrimonio de la Humanidad y en el centro de Granada.

El visitante tiene la oportunidad de adentrarse en un universo de arte granadino con cabida para las artes, arquitectura, pintura y escultura. Durante los siglos XVI y XVII Granada vivió un periodo muy fecundo con un importante repertorio de artistas plásticos de talla universal, época que se corresponde con la construcción del edificio, de lo que debemos sentirnos orgullosos y estamos obligados a darlo a conocer. Si la meta es fomentar en Granada el turismo cultural, no podemos desaprovechar la ocasión, ni permitir que la ciudad pierda tan magnífico edificio vendiéndoselo al mejor postor.

Pero Granada es distinta, nuestro Ayuntamiento prefiere el museo en el banco de España, aunque no sea suyo, y poner a la venta el edificio histórico del siglo XVI.

Al dichoso banco, García Lorca lo definió como esperpéntico. Y creo que esta palabra es extensiva para la idea brillante de nuestro alcalde.

Esta entrada fue publicada en Artículos de Opinión. Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

*


*

Puedes usar las siguientes etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>