Publicado en Granada Hoy el 15/10/2007.
Los técnicos de la Consejería de Cultura de la Junta y de la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Granada cerraron ayer la crisis abierta un día antes por el concejal Luis Gerardo García-Royo, quien cuestionó que el prometido centro de danza pudiera tener cabida en los terrenos elegidos para el Espacio Escénico y ofreció “todas las parcelas de uso cultural del PGOU para que el centro de danza no se caiga de Granada”. La propuesta de nuevos solares la realizó en un debate junto al viceconsejero de Cultura, José María Rodríguez. Tras diversos cruces de acusaciones acabaron citando a sus respectivos técnicos -en medio de una acalorada crispación- para discutir el plan de usos y necesidades que se presentó esa misma mañana. Un día después, los técnicos de ambas instituciones comprobaron “que todas las necesidades tienen cabida en la parcela ofrecida por el Ayuntamiento”, según una nota de la Gerencia de Urbanismo. “Por lo tanto”, continúa la nota, “no hay ningún problema para que este proyecto siga avanzando”.
Además, los técnicos de Cultura sugirieron que sería conveniente la existencia de un aparcamiento subterráneo en la parcela colindante que está destinada a uso público, una vez que el plan de necesidades presentado por la Junta no incluye el parking en los terrenos del Espacio Escénico por problemas urbanísticos. Esta opción fue acogida positivamente por los técnicos municipales, quienes valoraron también que este aparcamiento esté vinculado de alguna manera al Consorcio del Espacio Escénico.
Del mismo modo, desde Cultura se solicitó en la reunión de ayer la posibilidad de usar ese espacio público colindante a la parcela del espacio escénico. Por parte de los técnicos municipales se sugirió que podría ser compatible la creación de una especie de auditorio al aire libre que complemente las instalaciones, “aunque son aspectos que habrá que ir perfilando”.
En definitiva, desde la Gerencia de Urbanismo se calificó esta reunión “como muy cordial y positiva”. “Desde el punto de vista urbanístico no existe ningún problema para que este importante proyecto para la ciudad de Granada siga adelante”, concluye la nota remitida desde el Ayuntamiento. Por su parte, la Consejería de Cultura de la Junta da por zanjada la polémica. “Ha sido una reunión cordial entre técnicos que, de todas maneras, estaba ya decidida entre las instituciones antes del acalorado debate del pasado martes”, aseguró ayer a este diario la Delegación Provincial.
El futuro Gran Teatro de la Ópera de Granada tendrá un aforo de entre 1.200 y 1.500 butacas como máximo; el espacio de exhibición previsto en el documento tendrá una extensión de 20 por 20 metros, mientras que la distancia entre el público y el escenario -la denominada “corbata”- medirá 2 por 10 metros. A los lados del telón se distribuirán otros dos espacios -llamados “hombros”- de 10 por 25 metros. Completarán el lugar de exhibición los almacenes, que tendrán una medida máxima de 10 por 40 metros y que podrían ser subterráneos.También se mantiene la intención de que el espacio escénico se convierta en sede administrativa del Festival Internacional de Música y Danza.
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