Carmen Pérez Porcel, Ciudadanos por Granada.
¿Cuándo fue la última vez que fotografiaron su edificio?, ¿no es cierto que nunca antes había pasado?…. Raúl Ruiz hacía estas preguntas a unos vecinos del Realejo en la carta que les dejó en los buzones y que estos encontraron al llegar a sus casas. Pero no crean que los interrogantes del –niñodelaspinturas- esperaban respuesta por parte de los vecinos, y menos aún pretendían el permiso de la Comunidad de Propietarios para poder usar la fachada del edificio, eran simplemente preguntas ociosas porque él ya se había tomado la libertad de graffitearla (la fachada) con sus botes de spray.
Desde una de las páginas web del niño Raúl, y bajo el nombre de “Arte para tod@s”, alguien llamado Kenny Ruidos, que dice ser su hermano, está lanzando una campaña de apoyo al movimiento graffitero y contra el artículo 37 B.15 de la Ordenanza de Limpieza, Ornato Público y Gestión Municipal de Residuos Urbanos (B.O.P. nº 159 de 22 de junio de 2006). El precepto legal que tanto molesta al niño y a su hermano, califica como de infracción grave sancionable con multa de 751 a 1500 euros “La realización de toda clase de pintadas, tanto sobre los elementos estructurales, calzadas, aceras y mobiliario urbano, como sobre muros y paredes exteriores de edificios, paredes y medianerías, etc… Excepto las pinturas de carácter artístico, para lo que precisará contar con la autorización de su propietario y de la Alcaldía”.
Un ataque antisistema siempre es frívolo e irresponsable, y más aún cuando se defiende con argumentos tan pueriles como decir que el Ayuntamiento ha hecho la Ordenanza Municipal porque ya no le gustan los graffitis. No se trata de una simple cuestión de gustos, mal que le pese al niño, sino de respeto hacía el Patrimonio y la Propiedad Privada que son conceptos (sobre todo el de respeto) que éste no entiende o, mejor dicho, que no quiere entender, aunque se lo diga uno de sus propios partidarios (Alberto Díaz) en el siguiente mensaje que le dejó en el blog; “Por lo que sé del tema (muy, muy poco) creo que la cosa empezó porque la UNESCO ha amenazado al Ayuntamiento de Granada con retirar la consideración del Albayzín como Patrimonio de la Humanidad debido a las pintadas (no se si grafittis o simples mensajes) de las paredes de algunas de sus calles emblemáticas. Supongo que desde el punto de vista del Ayuntamiento, eso debe de poner las pilas bastante “.
Le damos al niño el siguiente consejo para que no siga perdido legalmente en sus reivindicaciones, y es que deje de buscar inútilmente en la vía administrativa la forma de obtener el permiso que tendría que otorgarle la propiedad, y que empiece a indagar en la normativa civil (Código Civil, Ley de Propiedad Horizontal, etc… ) que es a la que tiene que acudir para dirigirse a los propietarios de un inmueble, aunque éstos sean el propio Ayuntamiento o cualquier otro Organismo Oficial del Estado.
A los propietarios, en lugar de darle consejos, tan sólo le advertimos de la reacción que tuvo el niño cuando lo requirieron los vecinos para que quitase las pinturas de la fachada. En este sentido, basta con hacer mención expresa de estos otros dos fragmentos de la carta; “Siéntanse escuchados, ya que borre gran parte de mi trabajo” y “Les rogaría que cesarán en su intención de presionar al empresario del local e intentasen cohabitar un poco con esa nueva pintura que ha aparecido”.
Pero como el tema va sobre la pintura, se podría decir que lo más pintoresco de la carta es que en la misma se presentaba como “Pintor Social”. Si el primer antecedente de la Pintura Social lo encontramos en el Arte Rupestre, a lo mejor resulta que las Cuevas de Altamira las pintó un antepasado suyo que debió de ser el primero de la dinastía….“elniñodelpaleolítico”. Y ya puestos a seguir diciendo disparates, lo siguiente será pedir que -laspinturasdelniño- aparezcan en los Catálogos de Arte junto a las obra del mejicano Diego Rivera; que puso su talento artístico al servicio de la Revolución Mejicana con murales como -Tierra y Libertad- donde Emiliano Zapata sujeta una pancarta con estas dos palabras que eran el lema de la Revolución, o a las del malagueño Pablo Picasso; que reflejó magistralmente en el -Guernica- los horrores de la Guerra Civil, mural que hizo por encargo del Gobierno Republicano para que decorase el Pabellón Español del la Exposición Universal de Paris de 1937.
Si de lo que se trata es de que el Arte salga de los museos para ocupar las calles…. ¡¡Que vuelvan las esculturas de Auguste Rodin a la Carrera de la Virgen!!.
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