La Policía Local, con un gran despliegue de fuerzas, entregó ayer los deshaucios. Algunos de los que viven en San Miguel se marcharán, pero no tienen donde ir.
Publicado en Ideal el 12/01/2007.
Las órdenes no se han hecho esperar. Los ‘okupas’ de algunas de las cuevas de San Miguel Alto, han sido los primeros en recibir las órdenes de abandonar las cuevas que habitan, de forma ilegal, en esa zona de la ciudad. La Policía Local, con un gran despliegue de fuerzas en previsión de altercados con los pobladores, entregó las notificaciones en las que se comunica la obligación de abandonar la cueva en un plazo máximo de 48 horas, en cumplimiento de un decreto firmado por el alcalde que pretende acabar con los problemas de salubridad y de seguridad de las propias cuevas y que no se produzcan derrumbes que podrían poner en peligro toda la ladera. De, ayer, ya se encontró a un ‘okupa’ muerto, posiblemente por accidente, en el interior de una de ellas.
Los habitantes de las cuevas no se va a marchar por las buenas. Mientras la Policía Local hablaba con algunos de ellos, otros colocaban carteles en las puertas de las cuevas con frases como «Aquí vivo yo, y quien quiera echarme, que se vaya a tomar por el culo». Otros aseguraban que nadie les va a a echar, «simplemente porque no tenemos a donde ir». Fernando, un portugués que llegó a Granada para trabajar y ocupó la cueva hace sólo diez días, afirma que si tiene que irse, se marchará, «pero tendré que dormir en la calle». Asegura que tiene trabajo y que por eso está en Granada «para trabajar y mandar dinero a la familia que está en Portugal». Exhibía la orden de deshaucio sin creer lo que le estaba pasando.
Por el contrario, un joven de unos 30 años, de nombre Andrés, era bastante más tajante. «De acá me sacan a palos, porque no me voy a ir», decía después de comentar que en cuanto al trabajo, «lo hago en lo mio», sin especificar más.
Los agentes de la Policía Local, lo tuvieron difícil para acceder a algunos puntos, ya que los ánimos estaban realmente caldeados tras conocerse las primeras notificaciones y después del hallazgo del cadáver del ‘okupa’ muerto en una cueva. De hecho algunos periodistas y cámaras de televisión no pudieron llegar al lugar del suceso porque les echaron a pedradas.
Los agentes de Policía Local continuarán hoy y en los próximos días con las notificaciones, que si ayer eran en San Miguel, ahora serán en puntos concretos del Sacromonte.
Los ocupantes de estas viviendas trogloditas no entienden que si están abandonadas no puedan ser usadas por otras personas, pero tampoco quieren saber nada sobre la seguridad de las estructuras y el peligro de derrumbe. Afirman que es una treta para poder echarles de sus viviendas.
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