Publicado en La Opinión y en Ideal el 24/01/2007.
Al menos medio centenar de agentes, entre Policía Local y Nacional, continúa hoy precintando en Granada las cuevas deshabitadas del cerro de San Miguel en el Sacromonte en lo que los okupas consideran un “plan especulativo” con el que el Ayuntamiento de la capital pretende “ejercer presión”.De este modo, los agentes siguen tapiando las cuevas vacías como ya hicieran el pasado viernes con 12 de estas viviendas. Según fuentes municipales consultadas, no está previsto que hoy se lleve a cabo el desalojo de las que están ocupadas ilegalmente, que prevé en su orden el Consistorio.
De hecho, según manifestó a Europa Press el portavoz de los okupas de la zona, Luis Carreira, “siguen notificando” las órdenes de desalojo de las cuevas ocupadas que el Ayuntamiento basa en la “falta de seguridad” y en la “insalubridad” existente, a partir de la cual existe un plazo para acatar la orden de 48 horas.
Intentan, según los afectados, aumentar el “miedo” y la “presión” entre los 37 ocupantes de las casas cuevas en esa zona, que han recurrido la orden de desalojo que consideran “innecesaria”.
Los okupas han denunciado además la intervención municipal el pasado viernes en el Cerro de San Miguel consistente en el “desmonte” y “cegado” de las cuevas porque, según consta en la denuncia, se ha generado “daño” a unas estructuras de habitación que podrían ser, según los denunciantes, “perfectamente recuperables”.
Entienden, por lo tanto, que se ha ocasionado un “daño irreparable en la estructura de los suelos afectados, que tienen -consta en el documento- un valor arqueológico protegido por el Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Albaicín (Pepri)”. Los okupas “no tienen constancia de que se hayan realizado las prospecciones y sondeos arqueológicos pertinentes”.