Publicado en Granada Hoy el 16/04/2007.
La juventud de hoy en día se pasa con la bebida, pero nunca mis hijos, jamás mis nietos. Las borracheras del fin de semana son cosa de otros. Así responde la abrumadora mayoría (el 87,1 por ciento) de quienes son padres o abuelos cuando se les pregunta si creen que los jóvenes consumen alcohol en exceso y si también lo hacen los menores de su familia. Esta respuesta previsible, ya devenida en tópico, sería casi chistosa si el alcoholismo no fuese un problema de salud pública de primera magnitud.
El último Barómetro Sanitario del CIS ha incluido esta cuestión en las 6.801 entrevistas realizadas durante el año pasado para analizar el estado de opinión de los residentes en España (los entrevistadores contactaron con ciudadanos de 42 nacionalidades, además de la española, que es la del 92,7 por ciento de los encuestados) sobre diversos temas relacionados con la salud, cuya protección ocupa el primer lugar entre las áreas de interés (28,3 por ciento), por encima de la vivienda (20,1 por ciento), la educación (18,8), la seguridad ciudadana (13,1 por ciento) o las pensiones, área de interés prioritario para el 9,7 por ciento de los encuestados esta vez por el CIS. El perfil de los entrevistados responde a una persona con estudios primarios, de bachillerato o FP en la inmensa mayoría de los casos (más del 70 por ciento) y de una horquilla de edad mayoritaria de entre 25 y 44 casos (más del 40 por ciento). Otro de los elementos definitorios del universo de la encuesta, que ayuda a dibujar el contexto de las respuestas es la situación laboral: mayoritariamente profesionales en activo (en el 49,9 por ciento de los casos) y un 22,1 por ciento de participantes en la encuesta del CIS jubilados o pensionistas.
Los padres y abuelos de los menores de 18 años consideran, en un 71,6 por ciento de los casos, que tienen mucha o bastante capacidad de influencia sobre los jóvenes de su familia para que eviten el consumo de bebidas alcohólicas, en sintonía con el prejuicio, confirmado por la encuesta, de la creencia en que el fenómeno del alcoholismo es un problema que no afecta a la propia realidad familiar. La mayoría de los encuestados está muy o bastante a favor -58,1 por ciento- de sancionar a los jóvenes por el consumo abusivo de alcohol, agregándose en torno a posturas más permisivas el 33 por ciento de los 6.801 entrevistados por los técnicos del CIS.
El Barómetro también chequea el estado de opinión en torno a la ley del tabaco. El 46 por ciento de los encuestados opinan que la mayoría de los fumadores respeta la norma; que los no fumadores sufren ahora menos molestias (58,5 por ciento) que antes de la aprobación de esta regulación; que con la nueva ley se fuma en menos sitios (evidencia que respalda la opinión explícita del 54,1 por ciento de los entrevistados por el CIS) y más de un tercio de los ciudadanos (34 por ciento) estaría a favor incluso de endurecer los términos actuales de aplicación de la ley del tabaco.
En cuanto a los factores que influyen sobre el estado de salud con el que se llega a la vejez, el 90,9 por ciento de los participantes en la encuesta opina que hacer ejercicio físico durante la juventud es una práctica determinante, papel preponderante compartido con la herencia genética, en el 82,6 por ciento de los casos. Asimismo, el funcionamiento de los servicios sanitarios es un factor de peso en un 81,9 por ciento de los casos para llegar a la ancianidad con buena salud. La alimentación es de notable relevancia para el 96,8 por ciento y la capacidad económica es importante para tener una vejez razonablemente buena para el 66,5 por ciento de los entrevistados por el CIS.
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