Publicado en Granada Hoy el 30/10/2007.
Apenas dos semanas después de conocerse el informe negativo del organismo autónomo de Parques Nacionales, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, sobre el teleférico para conectar Granada con Sierra Nevada, y cuando los voces críticas en contra por su perjuicio medioambiental aún resuenan en la opinión pública, el presidente del grupo UCOP, impulsor de la iniciativa, Juan López, defendió ayer en un debate celebrado por Granada Hoy y Localia TV la viabilidad del nuevo medio mecánico. Y lo hizo aludiendo al proyecto de teleférico impulsado en 2001 por el gobierno tripartito con motivo de la candidatura de Granada a las Olimpiadas de 2010, que, según dijo, sí contó con el respaldo de todas las administraciones. “Se trata de una iniciativa muy similar, sólo que en esta ocasión lo impulsa una empresa privada”, resumió.
No hubo contestación a esta premisa por parte de ninguno de los contertulios. Ni tan siquiera del senador socialista Manuel Pezzi, que se limitó a exponer que la situación era diferente, “en aquel entonces no era Parque Nacional, como ahora sucede”, puntualizó. Pero, Juan López, consiguió con esta afirmación arrancar de José Olea, ex presidente de Diputación y vicepresidente de Sierra Nevada en la década de los 80, su apoyo al proyecto como un medio de transporte ecológico y alternativo al vehículo privado, “un gran emisor de CO2“, señaló.
Pero, sobre todo, durante el debate brilló la sombra de la duda en torno a la “intención” final de la empresa de llevar a cabo un proyecto “que transportará 250.000 pasajeros, cuando tiene capacidad para un millón y medio”, advirtió Pezzi, y a la dilación de la Junta de Andalucía en la tramitación de la iniciativa empresarial.
No dejó nada clara Juan López la primera interrogación, pese a que el profesor de Derecho Constitucional, Agustín Ruiz Robledo, le urgió a esclarecer este aspecto para disipar así los rumores sobre la existencia de operaciones empresariales al margen del teleférico. Sin embargo, López Fernández se escudó en un millonario plan de viabilidad realizado por la empresa, de uso intransferible, para no aportar “mis números”, dijo, y darle así ventajas a la competencia. La Sociedad Anónima Teleférico Sierra Nevada, con capital de 600.000 euros, aportado por una docena de empresas, afirma que invertirá algo más de 40 millones de euros, si bien el proyecto se cifra en 129.550.000, que se sufragará echando mano a la banca. El “negocio”, como lo calificó Pezzi, según cálculos de la empresa será rentable dentro de 40 años. Pero, ¿si se le da autorización, qué pasará si la empresa se declara insolvente?, le inquirió el senador socialista, a lo que López espetó con un simple “para eso hay avales”.
Sí pareció, en cambio, unánime la opinión de los contertulios en cuanto a la tramitación del expediente por parte de la Administración autonómica. Todos, a excepción de Manuel Pezzi, coincidieron a la hora de tachar a la Junta de Andalucía de “oportunista”. “Después de la defensa que el alcalde, José Torres Hurtado, ha hecho del proyecto, está claro que está esperando a que pasen las elecciones para dar la respuesta”, apuntó Ruiz Robledo. Sobre todo, en opinión del presidente de UCOP, cuando ahora la Junta debe decidir si declara el proyecto Bien de Interés General, “la declaración de impacto medioambiental se deberá emitir después de este proceso”, explicó. Sin embargo, dejarle a Obras Públicas la decisión sin conocer su impacto sería una irresponsabilidad.
Impacto o utilidad. La promotora se aferra a un informe propio, que no desvela, como baza para que la Junta apruebe al final la polémica infraestructura