La reforma del Cuarto Real dejará ver sus restos arqueológicos

Junta y Ayuntamiento cierran 19 años de desencuentros con la restauración. Los trabajos finalizarán en año y medio.

Publicado en La Opinión el 09/10/2008.

Han sido necesarias casi dos décadas para que Junta y Ayuntamiento sellen un acuerdo en torno a la recuperación del Cuarto Real de Santo Domingo. La propuesta presentada por los arquitectos Javier Gallego Roca y Ramón Fernández-Alonso convertirá todo el recinto en un nuevo espacio para exposiciones, así como para contemplar y proteger los restos arqueológicos y la ‘qubba’ –parte del palacio del siglo XIII que se destinó a los actos de protocolo–, que son los verdaderos protagonistas de la intervención. El proyecto sigue las directrices marcadas por la Comisión provincial de Patrimonio, que obligaban a respetar todas las etapas históricas del recinto y, según los arquitectos, se aborda desde la “óptica del no construir”. La actuación principal se realizará en el edificio del siglo XIX, que se convertirá en una sala para exposiciones e introductoria al espacio principal. El interior de esta sala estará iluminado parcialmente por unas ventanas en el tejado que proyectarán haces de luz en el interior, en el que se eliminarán las estancias existentes y se podrá contemplar, mediante acristalamiento, los vestigios arqueológicos que se hallan bajo la edificación y la fachada principal de acceso a la ‘qubba’, cuya visión impiden ahora elementos constructivos. Se plantea, también, rebajar la altura de la cubierta para que no obstaculice la vista del edificio medieval.
Para proteger las excavaciones arqueológicas que se realizan en el exterior se levantará otro espacio que permitirá trabajar a los arqueólogos a la que vez que los visitantes acceden para contemplar las labores que se realizan en su interior. La actuación en la ‘qubba’ se reducirá a “liberarla de elementos que la dañan”, ya que era utilizada en el siglo XIX como sala de estar y todavía quedan evidencias de este uso en la estructura original. El exterior de los edificios y los jardines también se verán transformados al considerarse una parte importante del recinto.
Los jardines y el espacio que era utilizado para huertas se ordenarán y servirán de introducción a los visitantes del recinto arqueológico e histórico. Gallego Roca, que se encargó de explicar una parte del proyecto en el edificio histórico, afirmó que “no se engañará” con la intención de esconder la rehabilitación, sino que se trata de “conservar sin enfrentarse con la contemporaneidad”.
El delegado de Cultura, Pedro Benzal, y la concejal de Urbanismo, Isabel Nieto, destacaron el “entendimiento y el compromiso de colaborar” que han mostrado ambas administraciones para llegar a un acuerdo y dar una solución a la conservación del Cuarto Real. Ambos señalaron que a partir de ahora esperan críticas de los colectivos que defienden el derribo del palacete al considerar que no tiene valor, si bien añadió que “no vamos a dar un paso atrás”. Nieto adelantó que en unos seis meses podrían comenzar los trabajos del proyecto, que tendrá un plazo de ejecución de once meses y un presupuesto 1,8 millones de euros. El Ayuntamiento pedirá ayuda económica a la Junta de Andalucía para la intervención, aunque Nieto aseguró que en el caso de que no la obtengan la “acometerán en solitario”.

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