El poder judicial de Granada, en declive

Publicado en Ideal el 23/05/2009.

Granada lleva a gala ser la referencia judicial en Andalucía. Desde que en 1981 fuese elegida como sede del Tribunal Superior de Andalucía (TSJA), la Real Chancillería ha sido el símbolo del poder de la Justicia en la comunidad. Pero casi treinta años más tarde, en la actualidad, corre el riesgo de no ser mucho más que eso: un símbolo, una representación y órgano más ligado al protocolo de gobernar que al poder judicial real. El peligro que corre el peso de Granada en el ámbito judicial andaluz se debe a la inminente entrada en vigor de una reforma legislativa que atribuye nuevas competencias al Alto Tribunal andaluz. Contempla incrementar el número de salas de Lo Penal, y con ello el de magistrados. Su trabajo consistiría en revisar los recursos interpuestos a las sentencias emitidas por las audiencias provinciales. Algo que, hasta el momento, ha hecho el Tribunal Supremo.

Pero esta ampliación no tiene demasiados visos de desarrollarse en la Real Chancillería. Al menos, Granada parece haberse quedado fuera de un juego en el que, por ahora, sólo compiten Málaga y Sevilla.

Ambas ciudades -más la capital de la Costa del Sol- llevan meses de intensa campaña desde distintos ámbitos para ser sedes de la futura ampliación del Alto Tribunal andaluz. Y parece que lo están consiguiendo, si se tiene en cuenta los apoyos con los que cuentan en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el órgano de gobierno de los jueces.

Es el caso de Málaga y su flamante y puntera Ciudad de la Justicia. El vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Manuel Torres Vela, ha realizado numerosas comparecencias públicas en las que no ha dudado ni un momento en declara su apuesta por Málaga para ampliar las salas de lo Penal.

Tal y como se hicieron eco varios medios malagueños el pasado mes de abril, la pretensión de Torres Vela, ex magistrado de la Audiencia de esta ciudad, es que «cuando se lleve a cabo la reforma legislativa y se creen las respectivas salas en España, Málaga tenga una», declaró durante una intervención en el Colegio de Abogados de Málaga. Un apoyo que calificó de «compromiso personal».

Los argumentos

Sevilla, capital de Andalucía, también considera que debe tener esa sala. Un órgano que incrementaría el peso hispalense en el organigrama judicial andaluz, al sumarla a las de Lo Contencioso y Lo Social. Y varios vocales sevillanos también se han mostrado a favor de la ampliación en este sentido. Y no sólo los magistrados. Entre la abogacía, también. Recientemente, el decano del Colegio de Abogados de Sevilla, reclamó la creación de estas salas en la capital andaluza dentro del nuevo diseño de la jurisdicción Penal que elabora en estos momentos del ministerio de Justicia. Tanto unos como otros exponen la necesidad de desmembrar el poder judicial andaluz en detrimento de la capital granadina con argumentos relativos a la comodidad.

Tal y como expresaba el representante de la abogacía sevillana, «carecería de todo sentido que en una jurisdicción como la Penal, que precisa de la inmediación más que ninguna otra, se obligase a abogados y ciudadanos a desplazarse a Granada». Por ahora, lo cierto es que todos ellos tienen la obligación de desplazarse a Madrid, a la sede del Tribunal Supremo, que no tiene dispersa sus salas en ninguna comunidad española.

Comodidad y cantidad

El vocal malagueño Torres Vela elige razonamientos, quizá, más sesudos. Explica para apoyar a Málaga, y no la ampliación en Granada de la sala que ya existe, que «la Costa del Sol, por sus características, tiene asuntos de entidad y en cantidad suficientes para disponer de esta sala», recogieron los medios malagueños en la citada fecha. Y sobre la polémica, considera que no tiene sentido. Eso sí, se refería a Sevilla, que está en la batalla. Porque ni en Granada ni fuera de Granada se ha contemplado este asunto. Quizá porque esté por llegar. Pero las grandes ciudades andaluzas parecen no estar dispuestas a perder el tiempo.

En Granada, no se alzan voces, pero la opinión del presidente del Alto Tribunal andaluz, Augusto Méndez de Lugo, es contraria a la dispersión de las salas fuera de Granada. En la actualidad, sólo tres magistrados componen la sala de Lo Penal de Granada. Y su apuesta sería ampliar en el número de magistrados que fuese necesario esta última para acoger los recursos interpuestos a las resoluciones de cada Audiencia Provincial. El argumento del presidente del TSJA es de mayor peso en el ámbito jurídico. La dispersión física alimenta la disparidad de criterios. Cuando la unificación de doctrina, para que los jueces apliquen la misma, es lo que debería prevalecer en este caso. Y para ello, lo mejor sería ampliar la sala ya existente en Granada.

De cualquier modo, la reforma de la ley de 2003 permitió ampliar el TSJA fuera de Granada y se hizo con Lo Contencioso y Lo Social en Málaga y Sevilla. Un primer paso que ya se dio en su día y que se puede volver a repetir. De ser así, Granada sólo tendría la exclusividad en una sala, la de Gobierno.