El primera templo cristianizado de Granada permanecerá abierto al público durante dos semanas y en breve retomará su actividad religiosa.
Publicado en Ideal el 19/03/2007.
La Junta de Andalucía ha concluido la restauración de la iglesia mudéjar de San Juan de los Reyes, construida en las primeras décadas del siglo XVI en el barrio del Albaicín de la capital granadina sobre los restos de una mezquita, tras una inversión de 800.000 euros. Los trabajos sobre este Bien de Interés Cultural, que se iniciaron en 1999, han respetado las sucesivas intervenciones que ha sufrido el templo, con especial cuidado en los elementos mudéjares.Se trata de unas de los “edificios religiosos más singulares y emblemáticos”, explicó en rueda de prensa la consejera de Cultura, Rosa Torres, que consideró “ejemplar” la restauración realizada en la primera iglesia cristianizada de Granada, que conserva como elemento más destacado el alminar almohade transformado en torre del templo cristiano, cuyo cuerpo es el único que se conserva en la provincia del tipo de la Giralda.
Respeto por el conjunto
La intervención ha respetado los elementos originales y los añadidos de siglos posteriores, suma que en definitiva es uno de los rasgos distintivos de la iglesia. El conjunto se configura como un importante referente de la transición entre los modelos medievales islámicos y el nuevo orden renacentista.
El monumento, que permanecerá durante dos semanas abierto al público, recuperará “lo antes posible”, según el Arzobispado, su actividad religiosa. Tuvo diferentes intervenciones posteriores que han ido dejando su impronta como la barroca del siglo XVII, que consistió en el revestimiento y decoración mural; la intervención historicista del siglo XIX, neogótica; y constantes obras de mantenimiento y restauración a lo largo del siglo XX.
Fue trazado por Rodrigo Hernández con gran sencillez, pues presenta nave central, con cubierta mudéjar de par y nudillo, separada de las laterales, de cubierta inclinada, por grandes columnas de planta circular y semicolumnas adosadas sobre la que se apoyan seis arcos apuntados. La portada principal está conformada por un arco apuntado de ladrillo enmarcado por un alfiz.
Graves Deterioros
A pesar de las numerosas intervenciones de mantenimiento y restauración acometidas durante el pasado siglo, el edificio presentaba un mal estado de conservación generalizado: deformaciones de las cubiertas, humedades por aguas pluviales y por capilaridad, pavimentos en mal estado, instalaciones obsoletas, deterioro de los elementos decorativo, etc. A esto hay que añadir los problemas ocasionados por la ocupación del entorno por rellenos incontrolados, que han provocado empujes y humedades.
Para llegar a un conocimiento científico del inmueble se acometieron unos detallados estudios previos que incluyeron excavaciones arqueológicas, estratigrafía paramental, caracterización de materiales, estudios histórico-arquitectónicos, estudios de materiales y propuesta de intervención en la policromía y sebka del alminar almohade.
La intervención sobre el edificio ha incluido fundamentalmente el tratamiento de humedades por capilaridad, reparación estructural de las fábricas, actuación sobre paramentos, reparación integral de armaduras y cubiertas, repavimentación, restauración de la portada lateral y de los elementos decorativos de alminar, renovación de las instalaciones y una serie de actuaciones en el entorno de la iglesia.